La Falla, en pleno incendio, segundos antes de desmoronarse completamente ante el aplauso y exclamación de júbilo de los presentes.
Finalmente, en la noche del pasado sábado 29 de marzo, luego de un impactante espectáculo de fuegos de artificio, se realizó la quema de la Falla, que este año se llamó «Bailando por un sillón», representando con ironía (como es la costumbre en estos eventos) la lucha de los partidos políticos por acceder al poder, no faltaron en la composición de la misma, muñecos representando pingüinos, gente que se tiraba sin agua a una pileta y personas sin cabeza.
El monumento es obra del artista Paco Martinez.
La Falla, antes del fuego.
El evento fué organizado por La Unión Regional Valenciana, quién nombró al intendente de la ciudad, Gustavo Pulti, «Fallero Mayor» y encargado de llevar la llama que encendió el fuego, tal como se viene haciendo desde hace 53 años.